Nazca Capital entra en el accionariado de Lãberit: un nuevo impulso para nuestro futuro

En Lãberit iniciamos una nueva etapa clave en nuestra trayectoria con la entrada de Nazca Capital en nuestro accionariado. El fondo de inversión ha adquirido una participación minoritaria que no solo supone una inyección de capital, sino también la incorporación de su experiencia en el impulso de compañías con alto potencial de crecimiento. Con más de 25 años de recorrido, Nazca ha acompañado a más de 70 empresas en procesos de expansión, consolidación e internacionalización, aportando visión estratégica y solidez financiera.

Un aspecto esencial de esta operación es que la dirección y la mayoría accionarial permanecen en manos de los socios fundadores de Lãberit, todos ellos profesionales que, además de accionistas, forman parte activa del día a día de la compañía. Esto asegura la continuidad de nuestra cultura y de la forma de hacer que nos ha definido desde el inicio.

Esta operación supone un refuerzo decisivo para nuestro crecimiento, tanto a nivel nacional como internacional, y abre la puerta a nuevas adquisiciones de compañías que compartan nuestra cultura y visión. Es una validación clara de un proyecto en el que ya confiaban clientes y equipos, y que ahora también cuenta con el respaldo de inversores especializados en hacer crecer compañías tecnológicas con ambición global.

Mirando más alto, más lejos

Hoy somos más de 1.000 profesionales, con proyectos en 25 países y la previsión de superar los 70 millones de euros de facturación en 2025. Este nuevo capítulo nos permitirá dar un salto cualitativo en áreas clave como la inteligencia artificial, la analítica de datos, la consultoría empresarial o el software sanitario. Nuestro plan estratégico incluye también adquisiciones de empresas que refuercen nuestro posicionamiento y aporten nuevas capacidades, siempre preservando la cultura y la forma de hacer que nos definen.

En duacode estamos orgullosos de formar parte de este viaje. Lo importante no es solo el capital que entra, sino lo que representa: la confirmación de que estamos en el camino correcto y con los mejores compañeros posibles para mirar más alto y más lejos.

Seguimos.